La terapia génica pretende
«curar» la diabetes mediante la identificación y modificación de los genes
implicados en el desarrollo clínico de la enfermedad.
Mediante:
- Modificación el sistema inmune para evitar el rechazo de las células beta productoras de insulina.
- Promover la formación o regeneración de células beta.
- Generación de células no-beta productoras de insulina, como consecuencia de la dificultad para obtener células beta pancreáticas.
Puede ser:
- In vivo: introducción de genes terapéuticos directamente en las células defectuosas.
- In vitro: se extraen las células afectadas del paciente, se modifica genéticamente y se transplantan nuevamente al paciente.
BIBLIOGRAFÍA:
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